Reglas para musulmanes difuntos
Al tocar el cuerpo de un musulmán difunto, después de que su temperatura ha bajado; eliminando el calor corporal post-mortem, requiere que la persona que lo tocó realice una ablución obligatoria y precautoria.
Sin embargo, no hay problema en tocar el cuerpo de una persona fallecida cuando ya ha recibido la ablución mayor.
El cuerpo de un musulmán fallecido debe lavarse mediante una ablución funeraria mayor (ghusl al-mayyit). Un hombre fallecido debe ser lavado por otros hombres, y una mujer fallecida, debe ser lavada por otras mujeres, excepto el marido o familiares directas, que pueden ser lavados entre sí.
La ablución funeraria mayor consta de tres lavados: uno con agua y hojas de sidr, otro con agua y alcanfor y, finalmente; el tercero, uno con agua pura. Después de habernos lavado pasamos al tahnit (colocar un poco de alcanfor en la frente, palmas, rodillas y dedos gordos de los pies).
Después de recibir la ablución funeraria mayor, el cuerpo del difunto debe ser investido con el kafan, que consta de tres piezas de tela: el mi'zar, el qamis y el izar. El mi'zar debe cubrir el cuerpo del difunto desde el ombligo hasta las rodillas, pero es mejor que lo cubra desde el pecho hasta los pies, los qamis deben cubrirlo desde los hombros hasta las pantorrillas, pero, es mejor que lo cubra hasta los pies, y finalmente, el izar, que debe cubrir todo el cuerpo.
Después de que el difunto haya sido cubierto por el kafan, se debe realizar la oración fúnebre (salah al-mayyit). No es necesario estar en estado de pureza ritual para poder realizar la citada Oración, aunque sea todavía deseada y meritoria.
Para una correcta lectura de la Oración Fúnebre, se debe formular la intención (niyyat) y especificar el nombre del difunto en cuestión, aunque sea mentalmente. Luego, hay que girar hacia la orientación sagrada (qibla) con el cuerpo del difunto al frente. La cabeza del difunto, que debe estar en decúbito supino, debe colocarse a la derecha, mientras que las piernas del imam, y de los devotos deben estar la izquierda. Además, no se debe colocar ninguna separación, como una pared o un velo, entre el imam y el cuerpo del difunto.
La oración fúnebre consta de cinco pronunciaciones del takbir, que deben recitarse estando de pie durante la oración. Por lo tanto, en la oración fúnebre no hay reverencia (ruku'), postración (suyud), afirmación de fe (tashahhud) ni saludo (taslim). Después de la primera ronda del takbir, se debe pronunciar el testimonio de fe, después del segundo takbir se debe bendecir al Profeta Muhammad y a su familia, la paz sea con ellos, después del tercer takbir se debe invocar el perdón para los creyentes, y después del cuarto takbir, se debe ser pedir (invocar) el perdón por el difunto. Después del quinto takbir se concluye la oración fúnebre.
Lo último deber que se debe cumplir con el difunto es el entierro. El cuerpo del difunto debe ser enterrado bajo tierra, acostado sobre su lado derecho y en la dirección de la orientación sagrada de la Mekka.
Por: Islamshia.org/ Edición: Islam.cl
